Se llevan como el perro y el gato: mitos y verdades

¿Qué hay de cierto en esta frase?

Ambas mascotas llevan miles de años junto a los humanos y ambos son depredadores. Antiguamente estos animales no eran considerados mascotas como en la actualidad, si no que tenían su función en el hogar, ya fuera como perro guardián, cazador o cómo elemento contra plagas en el caso del gato, siendo el contacto entre ambos animales mínimo.

Estas características cazadoras y de guarda del perro hacía que el gato fuera considerado como una presa o un intruso, con las consiguientes peleas entre ellos.

Desmontando mitos:

Aunque existen muchos casos que confirman esta frase, lo cierto es que ambas mascotas pueden convivir perfectamente sin ningún problema, aunque siempre se tiene que tener especial cuidado en el caso de perros de determinadas razas, como las de caza, ya que el instinto cazador es mayor en éstos.

Pero ¿cómo conseguir una buena convivencia? Os damos algunos consejos:

• Educación temprana: siempre va a ser más sencillo acostumbrar a animales jóvenes al contacto con otro animal. Si tienes pensado en tener un perro y un gato puedes optar por adquirirlos desde cachorros y que pases esta etapa juntos. Si ya tienes una de las mascotas será más sencillo que el nuevo compañero sea un animal joven, aunque en ocasiones es un poco tedioso para la mascota adulta al ser el cachorro demasiado juguetón.
• Sin competencias: no debe haber competencia por recibir comida o cariño.
• Paciencia: es importante tener paciencia, en ocasiones puede resultar complicado, pero no imposible.
• Ayuda profesional: si crees que es difícil conseguirlo puede asesorarte un profesional veterinario o de comportamiento.

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Irene Martinez

Médica Veterinaria