La orina de mi perro es oscura. ¿Qué podría ser?

¿Por qué mi perro tiene la orina oscura?

El color de la orina de nuestro peludo nos va a dar muchos datos sobre su estado de salud. La orina normal es de color amarillento, semitransparente y sin turbidez pero, en algunos casos, puede cambiar de coloración y ser más oscura y turbia, por ejemplo:

Deshidratación: si el perro está más deshidratado la orina va a estar más concentrada, es decir, estará menos diluida y se verá más oscura. En casos más graves puede aparecer más turbia por la pérdida excesiva de electrolitos y minerales.
Infección urinaria: infecciones de orina pueden provocar un oscurecimiento de la orina, presencia de sangre en ésta y aspecto turbio, además el olor es muy desagradable.
Insuficiencia renal: en casos de insuficiencia renal grave puede aparecer sangre en la orina, el origen de la sangre está en los riñones dañados.
Cristaluria: los cálculos urinarios pueden provocar daño en la mucosa de la vejiga y aparecer sangre en orina, además se verá una orina turbia por los cristales que hay acumulados.
Anemias hemolíticas (rotura de glóbulos rojos): en casos de anemias hemolíticas donde hay destrucción de glóbulos rojos mucha de la hemoglobina que hay en su interior pasa a sangre y finalmente a la orina, dando un color rojizo también.

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¿Cómo sé si mi perro tiene una infección de orina?

Cuando hay infección urinaria podremos ver la orina más oscura de lo normal, pero a veces el perro orina en lugares donde es difícil distinguir un cambio de coloración, sin embargo, también podemos prestar atención a otros comportamientos y signos que pueden hacernos sospechar de este problema:

Micción en lugares inadecuados.
Lamido excesivo en la zona genital.
Enrojecimiento de vulva o inicio del pene.
Micciones muy frecuentes (similar a cuando marcan).
Nerviosismo.
Imposibilidad de orinar (en casos de infección junto con cristaluria y obstrucción uretral).

¿Qué pasa si la orina es demasiado amarilla o rojiza?

En el caso de que la orina de nuestro perro sea muy amarillenta es probable que haya estado demasiado tiempo reteniendo la orina o tenga cierto grado de deshidratación, por lo que la orina estará muy concentrada. En estos casos es importante hidratar bien a nuestro perro y sacarlo a pasear más frecuentemente para que no esté tan concentrada la orina y, si creemos que está correctamente hidratado y no retiene la orina, será necesario acudir a consulta para descartar otros problemas (infección, problemas hepáticos, etc).

Por el contrario, si la orina es rojiza o rosada, es probable que haya sangrado en vejiga apareciendo sangre en la orina (hematuria), causado por infección o cristales en la orina. Tampoco hay que olvidar que las hembras en celo presentan sangrado vaginal y pueden orinar con sangre sin que sea síntoma de infección.

Principales enfermedades relacionadas con el cambio de color de la orina

Alguna enfermedades pueden dar lugar a este cambio de coloración de la orina:

Anemia hemolítica: causada por parásitos hemáticos como Erhlichia, Babesia, etc y otras enfermedades.
Hiperplasia de próstata/prostatitis o tumores de próstata: en machos no castrados puede aparecer este problema a partir de los 4 años.
Daño hepático: también habrá presencia de vómitos y mal olor de la orina.
Daño renal: puede aparecer la orina muy transparente porque el riñón no puede concentrar la orina. También puede aparecer sangre.

¿Cómo tratar la infección de orina en perros?

Lo mejor que se puede hacer si vemos que el aspecto de la orina de nuestro perro ha cambiado u observamos hematuria (sangre) es acudir a consulta veterinaria donde le harán un análisis de orina para determinar la causa y confirmar si existe infección, cristales en la orina, etc. El tratamiento será diferente según la causa, por ejemplo:

Cristaluria: cuando hay cristales en la orina es muy importante que nuestra mascota esté siempre bien hidratada y conocer qué cristales son los que causan el problema. Existen piensos específicos para ayudar a eliminar algunos tipos de cristales o cálculos pero, en otros casos, el único tratamiento efectivo para eliminar los cálculos es la cirugía.
Infección urinaria: la presencia de bacterias en la orina puede aparecer con o sin cristaluria. En ambos casos será necesario dar un tratamiento antibiótico y antiinflamatorio que reduzca la infección y dolor.
Daño renal: para saber si hay insuficiencia renal es necesario hacer una analítica sanguínea. Un tratamiento intensivo de sueroterapia y protectores renales puede tener mucho éxito.
Anemia hemolítica: estas anemias pueden ser autoinmunes o causadas por algunas bacterias o parásitos, habrá que determinar la causa para elegir el tratamiento adecuado, aunque algunos casos pueden tener mal pronóstico.

Nunca debemos olvidar que una buena hidratación y paseos frecuentes son importantes para prevenir problemas como los cristales urinarios o infección de orina, ya que evitaremos que la orina esté muy concentrada y retenida.

Irene Martinez

Médica Veterinaria